IV
PARTE…
¡Sus
dibujos estaban ante sus ojos!, Gloria, no podía creerlo ¡como pudo dibujar aquello!
Si nunca había visitado este lugar. No comento nada a Iñaki ¡Como iba a
creerla! Pero era realmente fantástico, increíble que durante sus paseos por
los campos, viese el paisaje de sus dibujos al carboncillo que, de niña había
hecho; incluso ¡La Iglesia rodeada de tilos y el camino sembrado de flores!
Mientras Iñaki, recibió una llamada telefónica, poco después, su padre había
enfermado y se encontraba en el hospital. Gloria, le acompaño hasta la estación
diciéndole hasta pronto. Iñaki, la llamo dos días después diciendo que su padre
falleció de un infarto y, que él no volvería por el momento a Paris. Quedaron
para verse en Nochevieja en Bilbao y festejar el año juntos; hasta esta noche
en la que vio el arresto de Iñaki. Al día siguiente su intuición le decía de
comprar el periódico en el kiosco. Sus ojos se agrandaron más, al ver que
efectivamente Iñaki lo habían arrestado bajo la acusación de pertenecer a
“ETA”. Gloria, no lo dudo y cogió el
tren rumbo a Bilbao .Ya en el tren iba bastante nerviosa. Antes se puso en
contacto con su familia, la recogerían en la estación de Bilbao hasta el
caserío. Gloria, se encontraba inquieta, angustiada y el trayecto le pareció
eterno. Al cruzar la frontera le piden el pasaporte; el policía con el
pasaporte en la mano llama por teléfono, al mismo tiempo que la observaba.
Pasaron unos minutos que fueron interminables, angustiosos. Sentía un pánico tremendo,
no era capaz de razonar y su mente estaba nublada. Sus piernas flaqueaban ante
la mirada insistente del policía y un nudo en la garganta que le impedían respirar.
Sabía que esto le iba a ocurrir, dejando la premonición de lado se lanzo en
busca de informes sobre Iñaki. Después de un buen rato, el policía metralleta
en mano le devolvió su pasaporte. El
miedo se apodero de ella, temblaba ante la mirada de desprecio de aquel policía.
Al llegar a Bilbao, uno de sus hermanos la recogió en la estación. Gloria, lo
reconoció por su gran parecido con Iñaki. Ellos fueron muy atentos con ella,
pero Iñaki seguía incomunicado. Le contaron que Iñaki fue arrestado, torturado
brutalmente, hasta tal punto que tuvieron que ingresarlo en el hospital. Interviniendo
en este caso de tortura “Amnistía Internacional” Todo lo que le contaban lo
sabía por sus sueños; sufría tremendamente en sus carnes, creyendo por momentos
volverse loca de dolor y de angustia. Pero Gloria, sabía su inocencia y de
nuevo la misma impotencia se apodero de ella. Nada podía hacer por Iñaki,
simplemente esperar su juicio. Año y medio después lo juzgaron sin obtener la
confesión de que el perteneciese a la banda, a pesar de las torturas
infligidas, tal como la policía pretendía. U año y medio en el que Gloria, perdió
el sueño, adelgazando más todavía, en su rostro se podía leer la desesperación.
España se encontraba en unos años negros con el problema vasco. Hubo por ambas
partes tantos errores, otros fueron ciertos, pero también mucha sangre por
medio. Cuando salió de la cárcel se puso en contacto con Gloria. Mientras,
había puesto una querella contra la guardia civil, ganándola por supuesto.
Gloria se alegro muchísimo de verlo; de saber que estaba vivo después de tanta
incertidumbre. Se abrazaron emocionados y Gloria no pudo evitar de derramar
lágrimas de emoción. Pasaron unos días juntos en una pensión en Bilbao. Gloria,
entonces se dio cuenta que su mirada había cambiado; ya no era el mismo
apiadándose de su mala suerte. Cuando salían juntos por las calles, miraba por
donde pasaban asustado, inseguro. Gloria, sabía que le seguían por las calles.
Incluso le pusieron no se sabe quien una bomba en el coche; estallo poco antes
de subirse. Sabían muy bien las horas de
salida y de entrada; estaba controlado por quien fuese, al igual que ella. Fue
entonces cuando, Iñaki decidió marcharse por América Latina, jurándole a Gloria,
que cuando se ubicase en alguna parte, ella fuera a su encuentro y allí se
casarían. Que no se preocupase si no le escribía a menudo; no deseaba que dieran con él. Le escribió bajo un seudónimo,
para luego pasar los meses, los años sin saber nada del. Fue horrorosa aquella
pesadilla. Gloria, sabía que esto ocurriría, pero su amor por Iñaki le cegaba
la mente. Gloria, prometiéndose de que nunca se casaría, nunca podría amar de
nuevo. Pero la vida es sorprendente y, te espera a la vuelta de la esquina. En
su trabajo como traductora encontró de nuevo el amor, nada que ver como el amor
pasión que sentía por Iñaki. Finalmente cedió y se caso; dos hijos colmaron el vacio de su alma. Sus padres
sabiendo lo ocurrido, se alegraron tanto de que ella saliese por fin de su
apatía en la que se encontraba. Su marido fue tan comprensivo con ella, la
amaba tanto que, eso la enterneció, que ella le dio su cariño, nunca su alma.
Gloria, nunca podría olvidar a Iñaki, pero, sabía perfectamente que Iñaki,
nunca jamás volvería a ser el mismo. Aquella tragedia había mermado la
capacidad sicológica de Iñaki, aquellas torturas estaba segura que le
perseguían y que jamás se volverían a ver. Ella opto, pretendió ante todos que
lo había olvidado; preguntándose porque la vida fue tan injusta separando dos
seres que realmente se amaron.
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