Madre...Madre hoy he recordado el pasado ojeando el álbum
de familia. Qué hermosa eras madre, elegante, distinguida de porte altivo tú
rostro casi perfecto, fascinante yo diría ¡En tus labios había una sonrisa
picara junto con esa mirada tuya…Tenias a tus pies todo, el amor, una familia,
posición y dinero; la guerra destruyo tus ilusiones hambre, penuria, destierro
fue tan siniestro....Borrando para siempre de tus labios tu sonrisa picara y
quedando tu rostro sin alegría. Pasaron los años madre, tu cuerpo transformándose;
los hombros cargados por una dura existencia de penas, de llantos, de
tristezas. Tus manos temblorosas, tú mirada de angustia, adentrándose tu mente
sin querer en un mar de tinieblas, olvidando para siempre los recuerdos de tu
memoria; querías alcanzar las estrellas del firmamento, reencontrarte con mi
padre allá arriba, descansar eternamente junto a él de esta vida. Un otoño ya
lejano…se apago para siempre tu mirada perdida, muy dulcemente… casi sin darnos
cuenta, provocándonos una gran tristeza. Tus labios no se abrieron para
escuchar tu voz una última vez, o un adiós madre... pero cuando la muerte te
abrazo ella en tu rostro dejo esa sonrisa picara. Hoy muchos años después te
recuerdo todavía, que hermosa eras madre mía .Elegante, distinguida de porte
altivo, tú rostro casi perfecto, fascinante yo diría ¡en tus labios había una
sonrisa picara junto con esa mirada tuya ¡
Marilo Dominguez.
04/04/20012.
No hay comentarios:
Publicar un comentario