Después de echarse a volar lejos del halcón traicionero, la paloma blanca encontró
su libertad perdida. Decidió sin dudarlo y se acerco hasta el palomar de sus polluelos, pensando
encontrar cobijo con alguno de ellos; tan solo por seria, unos pocos días, hasta
que ella se ubicase, en un nuevo nido. Grande, enorme fue la sorpresa, cuando
ninguno de ellos se apiado de ella… olvidando que por sus venas corría sangre
de aquel halcón traicionero. Sus polluelos le negaron cobijo, alegando que a su vez tenían sus vidas, polluelos. La
paloma blanca desconcertada lloraba sin consuelo; pensando que algún cazador
furtivo… tal vez de un tiro la mataría, acabando para siempre su triste vida. Pero
otra vez esa voz interior le decía; venga blanca paloma, mira el ancho cielo, piensa
en ti… olvida tus polluelos. Decidió escuchar su voz interior y vivir por fin para
ella. Nunca podrá olvidar a sus
polluelos; eran el aire que respiraba, toda su vida. Ahora vive en un palomar
lejos de ellos, un lugar hermoso rodeado de mar y verdes montañas. Piensa…que quizá
algún día vuelvan; ella abriría sus alas de nuevo, sonriendo sin preguntarles
nada; quizá dejo sin querer alguna
herida abierta, si así fuese pediría perdón sin duda. Estaba tan perdida con su
propia vida; pero ella, todavía espera
encontrar en su camino, la blanca paloma el amor, la paz y el consuelo. Después de este desconcierto , hubo dolor, resentimiento hacia la propia vida, también por todos aquellos que me abandonaron a mi suerte. Hoy recuperada mi autoestima, mi dignidad, he perdonado y me he perdonado ; de nada sirve llorar, mis lagrimas no me devolveran mi pasado, tampoco mi vida perdida. He aprendido, que no puedo vivir con heridas abiertas, están cicatrizadas. De nuevo mis hijos volvieron, a su vez ellos son los divorciados ahora, acudieron a mi cuando menos lo esperaba.Abri grande mis brazos y lloramos juntos. Mi vida a estado marcada terriblemente, pasando del dolor a la felicidad y viceversa. Soy una mujer nueva, a pesar que ahora me encuentro en el otoño de la vida; no cambiaria por nada mi nueva vida.
Cosas de la vida…
He recorrido a lo largo
y ancho por la vida,
teniendo juventud
creía tener, él mundo entre mis manos.
Recibía rosas…o poesías
me robaron besos….con sabor a miel a canela,
y he reído a carcajadas…
Creía tener el amor, familia, amigos
teniendo posición y dinero,
ellos cuando más creían que tenia,
más me decían un te quiero.
Llego un revés inesperado en mi vida,
adiós al amor, adiós familia, adiós amigos,
salvo aquellos, los verdaderos…
que me dijeron un te quiero.
Por favor... no
ahora no me vengan
con llantos y mentiras,
que mi alma está malherida.
He amado, he odiado sin medida,
llorando hasta, ahogar mi alma,
saliendo después de mi lenta
travesía por el desierto.
Decidiendo de nuevo, recorrer por la vida,
perdonando, cerrando heridas,
cerrando con cadenas mentales,
la caja entreabierta de Pandora.
Por favor... no
ahora no me vengan
con llantos y mentiras,
que mi alma está aun dolorida.
Hoy en...el otoño de mi vida
ya no me roban besos,
pero guardo en mi boca
aquel sabor a miel y canela.
Sigo riendo a carcajadas
aunque a veces
ahogue de lagrimas mi alma,
ya no me sorprende casi nada,
aprendiendo tanto de la vida
que he decidido por fin
de nuevo recorrer, a lo largo
y ancho mi nueva vida.
y ancho por la vida,
teniendo juventud
creía tener, él mundo entre mis manos.
Recibía rosas…o poesías
me robaron besos….con sabor a miel a canela,
y he reído a carcajadas…
Creía tener el amor, familia, amigos
teniendo posición y dinero,
ellos cuando más creían que tenia,
más me decían un te quiero.
Llego un revés inesperado en mi vida,
adiós al amor, adiós familia, adiós amigos,
salvo aquellos, los verdaderos…
que me dijeron un te quiero.
Por favor... no
ahora no me vengan
con llantos y mentiras,
que mi alma está malherida.
He amado, he odiado sin medida,
llorando hasta, ahogar mi alma,
saliendo después de mi lenta
travesía por el desierto.
Decidiendo de nuevo, recorrer por la vida,
perdonando, cerrando heridas,
cerrando con cadenas mentales,
la caja entreabierta de Pandora.
Por favor... no
ahora no me vengan
con llantos y mentiras,
que mi alma está aun dolorida.
Hoy en...el otoño de mi vida
ya no me roban besos,
pero guardo en mi boca
aquel sabor a miel y canela.
Sigo riendo a carcajadas
aunque a veces
ahogue de lagrimas mi alma,
ya no me sorprende casi nada,
aprendiendo tanto de la vida
que he decidido por fin
de nuevo recorrer, a lo largo
y ancho mi nueva vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario